“El Hospital de los Podridos” de Tranvía Teatro

El Hospital de los Podridos” es un divertido y atractivo espectáculo que nos traslada a un Corral de Comedias del Siglo XVII. Una compañía de cómicos ambulantes representa una colección de entremeses, loas, bailes, mojigangas y chascarrillos de los grandes autores del Siglo de Oro. Descubriremos una extraña enfermedad de pudrición, la curiosa cirugía estética de la época, que aqueja a quien presume de envidia, celos, ambición desmedida, racanería… veremos los cuidados y afanes por la belleza, el castigo popular ante las injusticias, la vida de los cómicos de la legua, los duelos, los requiebros, las peleas; celebraremos el Carpe Diem pero también bailaremos a la Muerte, observaremos los engaños y tretas para obtener un excelente casamiento… y comeremos y beberemos vino en mitad de la representación tal y como se hacía en los viejos Corrales de Comedias españoles donde el teatro era un gran, gran, gran fiesta. Un homenaje a nuestro patrimonio teatral. Una fiesta del Teatro, de nuestro Teatro. Teatro Puro y Fiesta Absoluta donde oír decir el verso es un placer y una fiesta de todos los sentidos.
El Hospital de los Podridos se ha creado tras un profundo estudio del teatro del Siglo de Oro y los entremeses y loas de la época, algunos de ellos muy pocas veces publicados, atribuidos a Cervantes, Calderón, Lope de Vega, Quevedo, Quiñones de Benavente, Bernardo de Quirós y otros autores anónimos del siglo XVII con el que el público se reía y se hacía la crítica social a los males y los poderos de la época, con un criterio de adaptación a la compresión del espectador del siglo XXI. Contiene algunas de las loas que las compañías itinerantes de comediantes hacían de sí mismas en el comienzo de sus espectáculos, y algunas de las músicas de la Corona de Aragón en esa época.
Tranvía Teatro, a punto de cumplir 25 años de vida, es la Compañía Residente del Teatro de la Estación, una de las más antiguas y permanentes de las compañías españolas cuyo repertorio de teatro contemporáneo y sus incursiones en el clásico le han merecido los mayores reconocimientos.
¡No os la perdáis!