Lo llaman el "noveno arte" y quienes se encargan de estudiarlo y, sobre todo, de disfrutarlo, así lo atestiguan. Es el caso de Juan Royo, un economista cuya mayor pasión es el cómic. Durante años ha escrito sobre ello y ahora su trabajo queda recogido en un libro. Un homenaje a los maestros que han marcado su vida a punta de lapicero.
El autor recopila artículos publicados en diferentes medios
Zaragoza.- La pasión que desprenden sus palabras queda reflejada en su mirada y en su sonrisa. Su libro “Un tratado de cómic” acaba de salir a la luz para mostrar una recopilación de los artículos que Juan Royo ha ido escribiendo en las secciones culturales de medios de comunicación económicos, pues Juan Royo es economista, profesor y, ante todo, un enamorado del cómic.
Se ha nutrido de los mejores maestros del género, con quienes ha compartido años de conversación, de encuentro y reflexión sobre sus trabajos, maestros que han respondido al cariño del autor con regalos en forma de dibujos que ilustran la publicación. “Es un libro muy personal. Aquí está parte de mi vida”, apunta.
Pregunta.- ¿Qué le diría a quien piensa que el cómic es cosa de niños?
Respuesta.- El cómic es un medio de comunicación y expresión, puede haber muchos géneros, como el terror, y no es para niños, o con una violencia extrema.
P.- Acaba de presentar “Un tratado de cómic”. ¿Qué incluye este tratado?
R.- Soy economista y profesor. Como me gusta mucho el cómic escribo sobre ello. Tengo la suerte de conocer a mucha gente y poder estar con ellos. Escribo sobre cómic en la sección de cultura de revistas de economía. Son muchas horas de convivencia, de conversación, de estar en salones, de estudiar la obra de cada uno de los autores. El editor, que también es guionista de cómic, Fernando Monzón, me dijo que quería hacer esta recopilación. Los dibujos sí que están hechos expresamente para el libro, algunos son regalos y otros son originales que he comprado a los autores.
P.- Una temática variada…
R.- Sí, porque no sólo abarca cómic, también ilustración, está David Vela o David Girau que son más ilustradores pero son tan buenos que no puedo evitar sacarlos.
P.- ¿Alguna predilección?
R.- Especialmente, aunque sólo sea por edad, Carlos Giménez, Rafael López Espí –que hacía las portadas de Spiderman en los años 70-80- y Antonio Bernal –creador de las portadas del Capitán del Trueno. Son autores que me han marcado desde niño. Un cómic lo compras por la portada, luego la historia importa, pero lo que primero te impacta es la portada.
P.- Tiene que hacer ilusión que tus “ídolos” ilustren tu libro…
R.- Muchísima. Es un libro totalmente personal, aquí está parte de mi vida. Me gusta darles a conocer, y ellos me han regalado dibujos, y sólo ser amigo de ellos para mí ya es una pasada.
P.- ¿Cómo un economista se convierte en un apasionado de cómic?
R.- Es una afición. Siempre me han gustado los tebeos, ahora me gusta no sólo leerlos, sino desmenuzarlos, estudiarlos, ver cómo está organizada la temática, el arte, las influencias, el encuadre de las viñetas, me gusta disfrutar más de eso.
P.- Tiene su propio blog, gestiona otro un blog sobre RSC , es profesor, ahora saca un libro... Cuénteme el secreto para aprovechar tan bien el tiempo
R.- Se lo robo a la familia. El trabajo es el trabajo, pero el ocio… y como no salgo por ahí, no voy de cena, ni de juerga… algún vicio tenía que tener, y es el de los tebeos (ríe).
P.- La RSC es un tema actual del que recientemente se ha realizado un congreso en Zaragoza, ¿qué conclusiones extrae de este encuentro?
R.- El congreso ha sido espectacular. Me he quedado impresionando con la gente buena que ha venido de fuera y dentro España. Creo que en este congreso se ha demostrado que Responsabilidad Social Corporativa es rentabilidad. Que no es obra social, no es altruismo, es management. Es transparencia, es calidad y son principios. Si eres capaz de mezclar estos ingredientes, tienes trabajadores más formados y más motivados, con lo cual, más productivos; y cuentas con productos que contaminan menos, con más calidad y la gente te va a comprar más. Y, además, tienes unas finanzas donde el dinero lo pones a trabajar en el mismo sentido que tus intereses, por lo que consigues una financiación más barata y, en consecuencia, es más rentable.
P.- ¿Cómo ve en Aragón el sector del cómic, tenemos buenos dibujantes?
R.- Los dibujantes aragoneses son extraordinarios. El colectivo Gato Negro o Malavida han dado un nivel altísimo. Y contamos con dibujantes individuales fabulosos, como Enrique Mendoza, que ha hecho la portada del libro. Es un chaval joven muy prometedor que, después del de Agustina, está sacando un cómic sobre los almogávares. Es quien más ha evolucionado de los que conozco. Desde Agustina ha avanzado, porque ese cómic era buenísimo, pero éste es increíble.
P.- ¿Y tenemos buenos lectores?
R.- Ése es el problema, que no existe una industria del cómic. Una industria puede surgir cuando el editor gana dinero editando los cómics. Hay una parte fundamental que es el artista, y otra es el editor, que se gasta su dinero e invierte como negocio. Existe un círculo vicioso. La sociedad en general lo asocia solamente a niños aunque hay un público adulto que podría ser lector de cómic. Los editores no apuestan por este tipo de público como negocio empresarial; estaríamos dispuestos a comprar tebeos pero lo siguen enfocando quizá hacia un público más infantil. Y lo mismo que puedes editar un libro puedes editar un cómic.
P.- Su blog personal se presenta con la leyenda “Nunca discutas con un imbécil, te hará descender a su nivel y allí te ganará por experiencia”. ¿Se ha encontrado con muchos imbéciles en su vida?
R.- Es una frase que me dijo mi madre y que gusta a todo el mundo. Es verdad. Hay gente con la que no puedes hablar. Pero, como ya lo sabes, no te puedes enfadar. Si hablo en chino y el otro español, no nos podemos entender. Si uno tiene un coeficiente y el otro, otro diferente, es imposible, si tengo unos principios y tú otros… Puedes discutir con quien tenga un mínimo común múltiplo contigo. No es que uno sea mejor que otro, sino que cada uno tiene unas prioridades y unas perspectivas.
Entrevista: Isabel Ara López para ARAGÓN DIGITAL
El autor recopila artículos publicados en diferentes medios
Zaragoza.- La pasión que desprenden sus palabras queda reflejada en su mirada y en su sonrisa. Su libro “Un tratado de cómic” acaba de salir a la luz para mostrar una recopilación de los artículos que Juan Royo ha ido escribiendo en las secciones culturales de medios de comunicación económicos, pues Juan Royo es economista, profesor y, ante todo, un enamorado del cómic.
Se ha nutrido de los mejores maestros del género, con quienes ha compartido años de conversación, de encuentro y reflexión sobre sus trabajos, maestros que han respondido al cariño del autor con regalos en forma de dibujos que ilustran la publicación. “Es un libro muy personal. Aquí está parte de mi vida”, apunta.
Pregunta.- ¿Qué le diría a quien piensa que el cómic es cosa de niños?
Respuesta.- El cómic es un medio de comunicación y expresión, puede haber muchos géneros, como el terror, y no es para niños, o con una violencia extrema.
P.- Acaba de presentar “Un tratado de cómic”. ¿Qué incluye este tratado?
R.- Soy economista y profesor. Como me gusta mucho el cómic escribo sobre ello. Tengo la suerte de conocer a mucha gente y poder estar con ellos. Escribo sobre cómic en la sección de cultura de revistas de economía. Son muchas horas de convivencia, de conversación, de estar en salones, de estudiar la obra de cada uno de los autores. El editor, que también es guionista de cómic, Fernando Monzón, me dijo que quería hacer esta recopilación. Los dibujos sí que están hechos expresamente para el libro, algunos son regalos y otros son originales que he comprado a los autores.
P.- Una temática variada…
R.- Sí, porque no sólo abarca cómic, también ilustración, está David Vela o David Girau que son más ilustradores pero son tan buenos que no puedo evitar sacarlos.
P.- ¿Alguna predilección?
R.- Especialmente, aunque sólo sea por edad, Carlos Giménez, Rafael López Espí –que hacía las portadas de Spiderman en los años 70-80- y Antonio Bernal –creador de las portadas del Capitán del Trueno. Son autores que me han marcado desde niño. Un cómic lo compras por la portada, luego la historia importa, pero lo que primero te impacta es la portada.
P.- Tiene que hacer ilusión que tus “ídolos” ilustren tu libro…
R.- Muchísima. Es un libro totalmente personal, aquí está parte de mi vida. Me gusta darles a conocer, y ellos me han regalado dibujos, y sólo ser amigo de ellos para mí ya es una pasada.
P.- ¿Cómo un economista se convierte en un apasionado de cómic?
R.- Es una afición. Siempre me han gustado los tebeos, ahora me gusta no sólo leerlos, sino desmenuzarlos, estudiarlos, ver cómo está organizada la temática, el arte, las influencias, el encuadre de las viñetas, me gusta disfrutar más de eso.
P.- Tiene su propio blog, gestiona otro un blog sobre RSC , es profesor, ahora saca un libro... Cuénteme el secreto para aprovechar tan bien el tiempo
R.- Se lo robo a la familia. El trabajo es el trabajo, pero el ocio… y como no salgo por ahí, no voy de cena, ni de juerga… algún vicio tenía que tener, y es el de los tebeos (ríe).
P.- La RSC es un tema actual del que recientemente se ha realizado un congreso en Zaragoza, ¿qué conclusiones extrae de este encuentro?
R.- El congreso ha sido espectacular. Me he quedado impresionando con la gente buena que ha venido de fuera y dentro España. Creo que en este congreso se ha demostrado que Responsabilidad Social Corporativa es rentabilidad. Que no es obra social, no es altruismo, es management. Es transparencia, es calidad y son principios. Si eres capaz de mezclar estos ingredientes, tienes trabajadores más formados y más motivados, con lo cual, más productivos; y cuentas con productos que contaminan menos, con más calidad y la gente te va a comprar más. Y, además, tienes unas finanzas donde el dinero lo pones a trabajar en el mismo sentido que tus intereses, por lo que consigues una financiación más barata y, en consecuencia, es más rentable.
P.- ¿Cómo ve en Aragón el sector del cómic, tenemos buenos dibujantes?
R.- Los dibujantes aragoneses son extraordinarios. El colectivo Gato Negro o Malavida han dado un nivel altísimo. Y contamos con dibujantes individuales fabulosos, como Enrique Mendoza, que ha hecho la portada del libro. Es un chaval joven muy prometedor que, después del de Agustina, está sacando un cómic sobre los almogávares. Es quien más ha evolucionado de los que conozco. Desde Agustina ha avanzado, porque ese cómic era buenísimo, pero éste es increíble.
P.- ¿Y tenemos buenos lectores?
R.- Ése es el problema, que no existe una industria del cómic. Una industria puede surgir cuando el editor gana dinero editando los cómics. Hay una parte fundamental que es el artista, y otra es el editor, que se gasta su dinero e invierte como negocio. Existe un círculo vicioso. La sociedad en general lo asocia solamente a niños aunque hay un público adulto que podría ser lector de cómic. Los editores no apuestan por este tipo de público como negocio empresarial; estaríamos dispuestos a comprar tebeos pero lo siguen enfocando quizá hacia un público más infantil. Y lo mismo que puedes editar un libro puedes editar un cómic.
P.- Su blog personal se presenta con la leyenda “Nunca discutas con un imbécil, te hará descender a su nivel y allí te ganará por experiencia”. ¿Se ha encontrado con muchos imbéciles en su vida?
R.- Es una frase que me dijo mi madre y que gusta a todo el mundo. Es verdad. Hay gente con la que no puedes hablar. Pero, como ya lo sabes, no te puedes enfadar. Si hablo en chino y el otro español, no nos podemos entender. Si uno tiene un coeficiente y el otro, otro diferente, es imposible, si tengo unos principios y tú otros… Puedes discutir con quien tenga un mínimo común múltiplo contigo. No es que uno sea mejor que otro, sino que cada uno tiene unas prioridades y unas perspectivas.
Entrevista: Isabel Ara López para ARAGÓN DIGITAL