Leo en El Mundo que el portero de un lujoso edificio de Nueva York ha encontrado entre unos arbustos el valioso cuadro del pintor francés Jean-Baptiste-Camille Corot (1796-1875) 'Retrato de una joven', cuyo paradero era desconocido desde hacía más de un mes.
Según publica el diario The New York Times, Franklin Puentes, portero de un inmueble de la Quinta Avenida, en el lujoso barrio del Upper East Side, recogió la obra de arte de la calle el pasado 29 de julio, unas horas después de que desapareciese.
El conserje creyó que podía ser de alguno de los inquilinos del edificio en el que trabaja, por lo que lo guardó hasta que encontrase a su propietario. Unos días después, se marchó tres semanas de vacaciones.
Al regresar, Puentes supo a través de los medios de la desaparición del famoso cuadro. Este domingo, decidió llevar a la policía el retrato, fechado en el siglo XIX y con un valor de entre 500.000 y 700.000 dólares (entre 381.650 y 534.310 euros), aunque inicialmente se había dicho que podía valer más de un millón.
"Me siento muy mal, no tengo comentarios", declaró Puentes al rotativo neoyorquino, al que añadió: "Por lo que a mí respecta, actué conforme a la ley".
Una noche con lagunas
Después de siete horas de interrogatorio en la comisaría y de que la policía haya realizado algunas pesquisas, varios oficiales creen que el conserje está diciendo la verdad y que se confirma así la versión del marchante del cuadro, James Carl Haggerty.
El marchante afirmó haber perdido el cuadro "porque había bebido demasiado", después de habérselo enseñado a un potencial comprador en el hotel Mark, también en el barrio del Upper East Side, a cinco manzanas del edificio donde Puentes trabaja desde hace 30 años.
Las cámaras de vigilancia del hotel muestran que el marchante salió del edificio portando el cuadro, mientras que en el vídeo que lo capturó llegando a su casa aparece sin la obra de arte en sus manos
Según publica el diario The New York Times, Franklin Puentes, portero de un inmueble de la Quinta Avenida, en el lujoso barrio del Upper East Side, recogió la obra de arte de la calle el pasado 29 de julio, unas horas después de que desapareciese.
El conserje creyó que podía ser de alguno de los inquilinos del edificio en el que trabaja, por lo que lo guardó hasta que encontrase a su propietario. Unos días después, se marchó tres semanas de vacaciones.
Al regresar, Puentes supo a través de los medios de la desaparición del famoso cuadro. Este domingo, decidió llevar a la policía el retrato, fechado en el siglo XIX y con un valor de entre 500.000 y 700.000 dólares (entre 381.650 y 534.310 euros), aunque inicialmente se había dicho que podía valer más de un millón.
"Me siento muy mal, no tengo comentarios", declaró Puentes al rotativo neoyorquino, al que añadió: "Por lo que a mí respecta, actué conforme a la ley".
Una noche con lagunas
Después de siete horas de interrogatorio en la comisaría y de que la policía haya realizado algunas pesquisas, varios oficiales creen que el conserje está diciendo la verdad y que se confirma así la versión del marchante del cuadro, James Carl Haggerty.
El marchante afirmó haber perdido el cuadro "porque había bebido demasiado", después de habérselo enseñado a un potencial comprador en el hotel Mark, también en el barrio del Upper East Side, a cinco manzanas del edificio donde Puentes trabaja desde hace 30 años.
Las cámaras de vigilancia del hotel muestran que el marchante salió del edificio portando el cuadro, mientras que en el vídeo que lo capturó llegando a su casa aparece sin la obra de arte en sus manos