"El Papa Bonifacio VIII estaba pensando en contratar a Giotto pero no las tenía todas consigo, por lo que envió un mensajero para pedirle al artista una muestra de su trabajo. Sin pensarlo dos veces, con un único y continuo golpe de mano Giotto dibujó sobre el lienzo un círculo perfecto. Cuando el mensajero le enseñó el lienzo al Papa, éste supo que se encontraba ante uno de los mejores pintores de la época."
(Giotto di Bondone, arquitecto y pintor italiano c.1266-1337)
(Giotto di Bondone, arquitecto y pintor italiano c.1266-1337)