Bajo el título genérico "Visión emocional de una ciudad" y comisariada por Ricardo Marco y Carlos Buil, el Museo Camón Aznar y la Lonja de Zaragoza recogen, del 19 de Abril al 5 de junio, una propuesta expositiva cuyo objetivo es:
1. percibir Zaragoza a través de la mirada de diferentes miembros de colectivos relacionados con el mundo del arte y la cultura
2. y ofrecer una visión de cómo está el mundo plástico de nuestra ciudad en estos momentos.
El proyecto contempla el hacer extensiva la participación a disciplinas tan variadas como artistas plásticos, fotógrafos, diseñadores gráficos, ilustradores, graffitis, arquitectos, escultores, escritores, poetas, periodistas, cómics,... siempre que estén vinculados con la ciudad de Zaragoza y, por supuesto, que el tema principal sea la ciudad. A todos ellos se les proporcionó una base sobre la que expresarse libremente. Esta base común consistió en una imagen de formato digital o papel de unplano de la ciudad de Zaragoza. Con esta base se trataba de que cada artista desarrollase y generase una obra de gran eficacia visual y que fuese capaz de crear un concepto, que a modo de poema visual transmitiera esa mirada personal sobre la ciudad. La ciudad colectiva es la ciudad visible, la que reconocemos en su inmediatez cuando caminamos, es la ciudad real. Frente a la piel de la ciudad se encuentra la ciudad individual, la invisible a los demás, que resulta íntima, personal, intransferible. La exposición nos ofrece un mapa de ciudades invisibles que conforman la realidad. Los trabajos presentado, que provienen de diversas disciplinas, trastocan la lógica y las asunciones preconcebidad y alimentan un universo lleno de poesía, ciencia, humor, folosofía, crítica, resultando al mismo tiempo íntimo y públicos.
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1. percibir Zaragoza a través de la mirada de diferentes miembros de colectivos relacionados con el mundo del arte y la cultura
2. y ofrecer una visión de cómo está el mundo plástico de nuestra ciudad en estos momentos.
El proyecto contempla el hacer extensiva la participación a disciplinas tan variadas como artistas plásticos, fotógrafos, diseñadores gráficos, ilustradores, graffitis, arquitectos, escultores, escritores, poetas, periodistas, cómics,... siempre que estén vinculados con la ciudad de Zaragoza y, por supuesto, que el tema principal sea la ciudad. A todos ellos se les proporcionó una base sobre la que expresarse libremente. Esta base común consistió en una imagen de formato digital o papel de unplano de la ciudad de Zaragoza. Con esta base se trataba de que cada artista desarrollase y generase una obra de gran eficacia visual y que fuese capaz de crear un concepto, que a modo de poema visual transmitiera esa mirada personal sobre la ciudad. La ciudad colectiva es la ciudad visible, la que reconocemos en su inmediatez cuando caminamos, es la ciudad real. Frente a la piel de la ciudad se encuentra la ciudad individual, la invisible a los demás, que resulta íntima, personal, intransferible. La exposición nos ofrece un mapa de ciudades invisibles que conforman la realidad. Los trabajos presentado, que provienen de diversas disciplinas, trastocan la lógica y las asunciones preconcebidad y alimentan un universo lleno de poesía, ciencia, humor, folosofía, crítica, resultando al mismo tiempo íntimo y públicos.
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