El Congreso Tecnologías para el Autismo que se está celebrando en Valencia es un punto de encuentro sobre tecnologías para las personas con TEA, sus familias, los profesionales que trabajan en este ámbito y todos aquellos que estén interesados en conocer las ventajas de las distintas tecnologías aplicadas al mundo del autismo.
Con el título Tecnologías para el Autismo: herramientas, tendencias y testimonios desde ayer se debate en Valencia se lleva acabo un diálogo internacional entre investigadores, empresas tecnológicas, familias y profesionales de la intervención para intercambiar ideas sobre la aplicación de las nuevas tecnologías al mundo del autismo y detectar avances y necesidades en este campo. Se presentan los últimos hallazgos de investigación así como testimonios y resultados de uso de programas tecnológicos y así recibir retroalimentación por parte de los usuarios de la tecnología y los profesionales de la intervención para que la tecnología pueda adaptarse cada vez más a las necesidades.
Uno de los platos fuertes del Congreso fue la conferencia impartida por Michael Rutter, autor de más de quinientos artículos de investigación, muchos de ellos sobre el autismo.
Su trabajo abarca estudios epidemiológicos en edades tempranas, estudios del autismo utilizando una amplia variedad de técnicas y disciplinas científicas, incluyendo estudios del ADN y neuroimagen, conexión entre investigación y práctica, influencia de las familias y escuelas, genética, trastornos de la lectura, factores biológicos y sociales de protección y de riesgo, entre muchos otros. Cada vez más, las nuevas tecnologías forman parte de nuestras vidas y están presentes en nuestros hogares y en las aulas escolares.
En el campo de la diversidad funcional, las tecnologías se están utilizando con más frecuencia para fomentar habilidades, comunicación y calidad de vida. En relación a los autistas, se han desarrollado estos últimos años diversas herramientas tecnológicas y se ha observado que pueden ofrecer una valiosa ayuda en la intervención.
El atractivo que suponen los ordenadores y la información visual para las personas con autismo, su carácter predecible y secuencial, la posibilidad de personalizar las aplicaciones para adaptarlas a las necesidades individuales... abren un abanico de posibilidades para trabajar aspectos como la mejora de la comunicación, las habilidades sociales, la estructuración de las tareas, el ocio adaptado, etc.
Para Miguel Gallardo las tecnologías son muy caras, por eso es necesario tener una guía y así conseguir sacarle el máximo rendimiento. “La tecnología puede volvernos locos: hay tantas aplicaciones que tenemos que frenar un poco. Tenemos que reflexionar qué es lo que queremos” dice Gallardo. Miguel Gallardo es el padre de María, una adolescente con autismo, y además es un dibujante de reconocido prestigio. Comenzó su carrera profesional compaginando el cómic (fue uno de los autores de Makoki, personaje icono del underground español) y la ilustración para acabar dedicándose plenamente a esta última actividad. Colabora habitualmente como ilustrador de prensa para la Vanguardia, Público y diferentes revistas y publicaciones de ámbito nacional e internacional como el Herald Tribune , New York Times y el El NewYorker.
En el 2007 publicó “María y yo”, una novela gráfica que narra las aventuras y viajes con su hija María de 13 años que tiene autismo También es el autor de El Viaje de María, un cortometraje de animación para dar a conocer el autismo. Acaba de finalizar el cortometraje de “Los Especialistas” que se centra en las habilidades de las personas con autismo que las hacen personas tan especiales. Cada uno queremos una cosa: los padres saben que en internet hay muchas aplicaciones pero los padres saben que sus hijos tienen necesidades muy concretas y necesitan una adaptación. Es necesario que alguien ordene todas las tecnologías. Hay autistas que apenas tienen lenguaje, otros tienen pero a lo mejor no lo utilizan correctamente.
En ocasiones hay problemas de conducta. La tecnología puede ayudarnos en estos campos. Para Gallardo: “un viaje en avión sin i-pad no es igual que un viaje en avión sin i-pad”. Y es fundamental para los hijos y para los padres. Se trata de simplificar. “A María (su hija) le encanta la música. Eso es un premio y así utilizo la tecnología”.
El Congreso está organizado por la Fundación Orange, la Fundación Adapta y Autism Speaks.
Con el título Tecnologías para el Autismo: herramientas, tendencias y testimonios desde ayer se debate en Valencia se lleva acabo un diálogo internacional entre investigadores, empresas tecnológicas, familias y profesionales de la intervención para intercambiar ideas sobre la aplicación de las nuevas tecnologías al mundo del autismo y detectar avances y necesidades en este campo. Se presentan los últimos hallazgos de investigación así como testimonios y resultados de uso de programas tecnológicos y así recibir retroalimentación por parte de los usuarios de la tecnología y los profesionales de la intervención para que la tecnología pueda adaptarse cada vez más a las necesidades.
Uno de los platos fuertes del Congreso fue la conferencia impartida por Michael Rutter, autor de más de quinientos artículos de investigación, muchos de ellos sobre el autismo.
Su trabajo abarca estudios epidemiológicos en edades tempranas, estudios del autismo utilizando una amplia variedad de técnicas y disciplinas científicas, incluyendo estudios del ADN y neuroimagen, conexión entre investigación y práctica, influencia de las familias y escuelas, genética, trastornos de la lectura, factores biológicos y sociales de protección y de riesgo, entre muchos otros. Cada vez más, las nuevas tecnologías forman parte de nuestras vidas y están presentes en nuestros hogares y en las aulas escolares.
En el campo de la diversidad funcional, las tecnologías se están utilizando con más frecuencia para fomentar habilidades, comunicación y calidad de vida. En relación a los autistas, se han desarrollado estos últimos años diversas herramientas tecnológicas y se ha observado que pueden ofrecer una valiosa ayuda en la intervención.
El atractivo que suponen los ordenadores y la información visual para las personas con autismo, su carácter predecible y secuencial, la posibilidad de personalizar las aplicaciones para adaptarlas a las necesidades individuales... abren un abanico de posibilidades para trabajar aspectos como la mejora de la comunicación, las habilidades sociales, la estructuración de las tareas, el ocio adaptado, etc.
Para Miguel Gallardo las tecnologías son muy caras, por eso es necesario tener una guía y así conseguir sacarle el máximo rendimiento. “La tecnología puede volvernos locos: hay tantas aplicaciones que tenemos que frenar un poco. Tenemos que reflexionar qué es lo que queremos” dice Gallardo. Miguel Gallardo es el padre de María, una adolescente con autismo, y además es un dibujante de reconocido prestigio. Comenzó su carrera profesional compaginando el cómic (fue uno de los autores de Makoki, personaje icono del underground español) y la ilustración para acabar dedicándose plenamente a esta última actividad. Colabora habitualmente como ilustrador de prensa para la Vanguardia, Público y diferentes revistas y publicaciones de ámbito nacional e internacional como el Herald Tribune , New York Times y el El NewYorker.
En el 2007 publicó “María y yo”, una novela gráfica que narra las aventuras y viajes con su hija María de 13 años que tiene autismo También es el autor de El Viaje de María, un cortometraje de animación para dar a conocer el autismo. Acaba de finalizar el cortometraje de “Los Especialistas” que se centra en las habilidades de las personas con autismo que las hacen personas tan especiales. Cada uno queremos una cosa: los padres saben que en internet hay muchas aplicaciones pero los padres saben que sus hijos tienen necesidades muy concretas y necesitan una adaptación. Es necesario que alguien ordene todas las tecnologías. Hay autistas que apenas tienen lenguaje, otros tienen pero a lo mejor no lo utilizan correctamente.
En ocasiones hay problemas de conducta. La tecnología puede ayudarnos en estos campos. Para Gallardo: “un viaje en avión sin i-pad no es igual que un viaje en avión sin i-pad”. Y es fundamental para los hijos y para los padres. Se trata de simplificar. “A María (su hija) le encanta la música. Eso es un premio y así utilizo la tecnología”.
El Congreso está organizado por la Fundación Orange, la Fundación Adapta y Autism Speaks.