Edgar Blanco, director de investigación en el centro de transporte y logística del MIT "La Logística del Futuro", ayer en PILOT
Cuando hablamos de innovación pensamos que se trata de algo que
solucionaría la vida, pero eso no existe.
Sin embargo, la logística actual se puede usar como base para conocer el futuro.
Para ello es bueno saber cómo ha cambiado la logística en los último 30 y 40 años.
Mientras que antes se hablaba de almacenamiento y transporte ahora se hace de compañías como Amazon o Zara.
El contenedor inventado en 1955 así como otras innovaciones actuales fueron hechas hace 30 o 40 años.
Si se quiere saber la perspectiva del futuro por tanto, se tiene que saber que está sucediendo hoy para predecir el futuro de las logística. En concreto, habrá ocho tendencias que marcarán el futuro.
1, energía limpia
Tanto por presiones ambientales como estratégicas hay indicaciones de que la dependencia del petróleo va a cambiar en los próximos años.
Por ejemplo, incrementará el número de camiones híbridos.
Ahora en EEUU cuando el coste del gas natural está bajando tan rápidamente se comienza a usar otro tipo de energías, esto implica el cambio del coste por milla.
2, smartphones y sensores
Está cambiando la comunicación.
Así, 6 billones de personas ya usan los smartphones.
Cuando se combinan estos con los sensores, por ejemplo, se puede pagar con el móvil o mediante mensajes de texto.
Con ello intercambiarán informaciones, flujo físico y flujo de dinero.
Permitirá una capacidad importante de competitividad e innovación mediante el manejo de nuevos productos e innovaciones.
3, megaciudades
En los próximos años va a haber en el mundo 10 ciudades con más de 10 millones de personas debido a los rápidos crecimientos urbanísticos, como es el caso de Bogotá. Se debe comenzar a pensar cómo se va a comenzar a realizar el reparto, tanto mediante entes públicos o privados, en estas ciudades.
4, economía del compartir
Las compañías quieren alquilar el producto en lugar de venderlo como con 99dresses, zipcar o Zilok, viable a vivir en ciudades. Está economía, en creciendo en Europa y EEUU, va a obligar a repensar la manera de vender, que actualmente es en una sola dirección.
5, fabricación personal
Se trata de centralizar la fabricación a nivel del individuo, por ejemplo la impresora en 3 dimensiones.
Esto va a tener impacto en los productos de reparación, no será necesario que se fabriquen componentes de reparación.
También cambiarán los accesorios de las personas, se descentralizará su fabricación.
6, venta multidireccional
Los clientes ya no están pensando en tener un producto en la tienda, también quieren tenerlo en su casa si lo piden por Internet.
7, transparencia total
Es necesaria cara al cliente, este tiene que saber cuánto le queda para recibir su mercancía.
Es el caso de “sourcemap”, que da a conocer los movimientos de la mercancía.
8, “big data”
Los más de 200.000 millones de tuits en Twitter son interesantes para conocer cómo se mira o conecta la información con otra.
Los “big data” reemplazarán las informaciones actuales. Surgirá una nueva vía de información que ahora se desecha.
Edgar Blanco, director de investigación en el centro de transporte y logística del MIT "La Logística del Futuro", ayer en PILOT
Sin embargo, la logística actual se puede usar como base para conocer el futuro.
Para ello es bueno saber cómo ha cambiado la logística en los último 30 y 40 años.
Mientras que antes se hablaba de almacenamiento y transporte ahora se hace de compañías como Amazon o Zara.
El contenedor inventado en 1955 así como otras innovaciones actuales fueron hechas hace 30 o 40 años.
Si se quiere saber la perspectiva del futuro por tanto, se tiene que saber que está sucediendo hoy para predecir el futuro de las logística. En concreto, habrá ocho tendencias que marcarán el futuro.
1, energía limpia
Tanto por presiones ambientales como estratégicas hay indicaciones de que la dependencia del petróleo va a cambiar en los próximos años.
Por ejemplo, incrementará el número de camiones híbridos.
Ahora en EEUU cuando el coste del gas natural está bajando tan rápidamente se comienza a usar otro tipo de energías, esto implica el cambio del coste por milla.
2, smartphones y sensores
Está cambiando la comunicación.
Así, 6 billones de personas ya usan los smartphones.
Cuando se combinan estos con los sensores, por ejemplo, se puede pagar con el móvil o mediante mensajes de texto.
Con ello intercambiarán informaciones, flujo físico y flujo de dinero.
Permitirá una capacidad importante de competitividad e innovación mediante el manejo de nuevos productos e innovaciones.
3, megaciudades
En los próximos años va a haber en el mundo 10 ciudades con más de 10 millones de personas debido a los rápidos crecimientos urbanísticos, como es el caso de Bogotá. Se debe comenzar a pensar cómo se va a comenzar a realizar el reparto, tanto mediante entes públicos o privados, en estas ciudades.
4, economía del compartir
Las compañías quieren alquilar el producto en lugar de venderlo como con 99dresses, zipcar o Zilok, viable a vivir en ciudades. Está economía, en creciendo en Europa y EEUU, va a obligar a repensar la manera de vender, que actualmente es en una sola dirección.
5, fabricación personal
Se trata de centralizar la fabricación a nivel del individuo, por ejemplo la impresora en 3 dimensiones.
Esto va a tener impacto en los productos de reparación, no será necesario que se fabriquen componentes de reparación.
También cambiarán los accesorios de las personas, se descentralizará su fabricación.
6, venta multidireccional
Los clientes ya no están pensando en tener un producto en la tienda, también quieren tenerlo en su casa si lo piden por Internet.
7, transparencia total
Es necesaria cara al cliente, este tiene que saber cuánto le queda para recibir su mercancía.
Es el caso de “sourcemap”, que da a conocer los movimientos de la mercancía.
8, “big data”
Los más de 200.000 millones de tuits en Twitter son interesantes para conocer cómo se mira o conecta la información con otra.
Los “big data” reemplazarán las informaciones actuales. Surgirá una nueva vía de información que ahora se desecha.
Edgar Blanco, director de investigación en el centro de transporte y logística del MIT "La Logística del Futuro", ayer en PILOT