Goya retrató a reinas y sirvientas, aristócratas y burguesas, guerrilleras y labriegas, mozas y adultas
Unas atractivas e interesantes, otras distantes, también las hay simpáticas, incluso divertidas y modernas, pero siempre desde la elegancia, el respeto y la admiración que lo convierten en un claro precedente del feminismo: la mujer adquiere protagonismo y respeto.
¿Cómo influiría el fenómeno fan en la personalidad de Goya? Su fama de pintor (era reconocido y adulado en sus paseos por la ciudad y requerido en fiestas de alto postín) le harían sin duda ser admirado y la imaginación de los autores de cómic elucubran desde discretos flirteos hasta tórridos romanes.
Goya es también la personificación del Mariano Renovales de Vicente Blasco Ibañez, "simplemente la personificación del deseo humano, este pobre deseo que, en realidad, no sabe lo que quiere, voluble y eternamente insatisfecho. Cuando, por fin, obtenemos lo que deseamos, no nos parece suficiente. "Más, quiero más", decimos. Si perdemos algo que nos vuelve la vida insoportable, de inmediato lo deseamos volver a tener como indispensable para nuestra felicidad. Así somos: pobres niños ilusos que llorábamos ayer por lo que despreciamos hoy y desearemos mañana, pobres seres engañados circulando por la vida en las alas icarianas del capricho”.
La exposición EL CÓMIC Y GOYA, UNA MUESTRA DE VENERACIÓN cuenta con cinco secciones: Retrato de Goya, España misteriosa, Pasiones goyescas, La guerra y Las Pinturas Negras.